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¿Sabías que hay plantas medicinales que actúan sobre los parásitos?

Las parasitosis son estados que afectan a menudo a los animales de producción, provocando una disminución del bienestar y, por tanto, causando pérdidas productivas o a veces la muerte de ejemplares jóvenes.

Larvas de nematodos

Hoy os hablamos de los nematodos, los cuales, según Juvenil and Shoiu (2012) son considerados los animales más abundantes y más diversos en el planeta por su gran capacidad de adaptación.

Los nematodos gastrointestinales, frecuentemente se presentan en forma subclínica, dificultando la detección y mucho más la medición de las pérdidas ocasionadas. Pueden ser dañinos si su carga es alta o el animal está en estados de inmunosupresión. Más importante aún es que nos enfrentamos a un reto constante que superar como lo es la resistencia por parte de los parásitos gastrointestinales a los fármacos de síntesis química como lo menciona Ahmad, H. A. (2018), perdiendo éstos su efectividad.

Las infecciones por nematodos gastrointestinales en rumiantes provocan una reducción del desarrollo en las etapas de nacimiento, crecimiento y finalización, menor producción de leche y ganancia de peso, y además de deterioro del sistema inmunológico. Estas situaciones provocan pérdidas económicas sustanciales. En cuanto a los signos clínicos evidenciados se observan habitualmente diversos grados de diarrea asociados a la presencia de nematodos en altos niveles de infestación como el síndrome de malabsorción, los cuales avanzan progresivamente en su severidad hasta niveles extremos con presentación de edemas y deterioro de la condición corporal.

Las parasitosis clínicas (causantes de enfermedad) son cada vez menos frecuentes, y es por eso que el uso de antiparasitarios, muy generalizado, se dirige fundamentalmente a evitar las pérdidas económicas asociadas a infecciones subclínicas, que no causan enfermedad aparente.

Actualmente los principales productos  conocidos preventivos o curativos que se contemplan para el control de las parasitosis forman parte de los denominados “medicamentos de síntesis química”.

El control de nematodos con antihelmínticos además de representar altos costos para las explotaciones ganaderas, ha propiciado altos niveles de resistencia parasitaria, como resultado del uso frecuente e indiscriminado de antihelmínticos. Esto se debe en cierta medida al no instaurarse como medida precoz de diagnóstico la realización de estudios de las heces (coprologías). Estos estudios individuales o colectivos, permiten ajustar las dosis y frecuencia de cualquier tratamiento. En conclusión, determinada ausencia de buenas prácticas puede decirse que ha sido causa de una amenaza a la vida útil de los mismos debido a la selección de poblaciones de parásitos resistentes. Adicionalmente, en el caso de no respetarse el tiempo de retirada (período durante el cual el producto animal no puede comercializarse, ya sea bien leche, carne, huevos, etc.) de los antihelmínticos en los animales destinados para consumo humano, se convierte en un problema de salud pública, debido al riesgo de aparición de residuos dañinos en productos de origen animal y daños causados al medio ambiente.

Por todo ello, la fitoterapia o uso de productos de origen vegetal con finalidad terapéutica, puede ser una alternativa muy eficaz para luchar contra los parásitos.

Las propiedades terapéuticas de las plantas se almacenan en diversas partes de su estructura como las hojas, semillas, tallos, frutos, raíces o corteza los cuales son procesados para obtener, por ejemplo, aceites esenciales o mucílagos. De esta manera, podemos hacer uso de los metabolitos secundarios -moléculas activas farmacológicamente hablando- con propiedades diversas como la actividad antiparasitaria, en el caso de los taninos y polifenoles.

Administración de bolo fitoterápico antiparasitario

Algunas plantas cuentan con estos compuestos en abundancia y podrían administrarse al ganado ya sea a través de su siembra en pradera forrajera o anual, como suplemento alimenticio o a través de productos fitoterápicos preparados a base de distintas plantas o partes de ellas.

Es el caso de la granada (Punica granatum), cuyos extractos evidencian cambios en la función de músculos y órganos reduciendo significativamente la motilidad de las larvas, generando parálisis o la muerte en estados L3.

Granada (Punica granatum)
Ajo (Allium sativum)

Asimismo, el ajo (Allium sativum) ha demostrado un efecto larvicida atribuido a uno de sus principales compuestos organosulfurados, el  ajoeno, causando alteraciones en el transporte de proteínas y lípidos generándose daños irreversibles en sus estructuras y posterior muerte de los parásitos.

Otra planta que ha demostrado tener propiedades ovicidas es la achicoria (Cichorium intybus), y que además causa parálisis en los nematodos, ya que las lactonas sesquiterpénicas que posse alteran el tegumento (pared exterior a modo de piel) y aparato reproductor de los parásitos.

Achicoria (Cichorium intybus)
Regaliz (Glycyrrhiza glabra)
Glycyrrhiza glabra L. / regaliz de palo. de José María Escolano tiene licencia CC BY-NC-SA 2.0

Existen relevantes referencias bibliográficas que atribuyen al regaliz (Glycyrrhiza glabra) potentes efectos antimicrobianos (antivirales, antibacterianos, antifúngicos y antiprotozoarios). Además, sus metabolitos secundarios inhiben en más de un 60% la eclosión de los huevos y el desarrollo larvario de L1 a L3 de los nematodos gastrointestinales.

El romero (Rosmarinus officinalis), concretamente su aceite esencial, posee un efecto nematicida, ovicida y larvicida por la presencia de metabolitos secundarios en su composición,  la cual revela hasta un total de 18 componentes activos.

romero (Rosmarinus officinalis)
Castaño de indias (Aesculus hippocastanum)

Por último, recientes estudios han puesto de manifiesto que el castaño de indias (Aesculus hippocastanum) además de flavonoides y taninos, contiene saponinas en sus semillas, las cuales tienen una acción antiprotozoaria por su efecto detergente al interactuar con el colesterol de las membranas, además de potenciar el sistema inmunitario.

Una gran ventaja a la hora de usar productos fitoterápicos, son sus propiedades simultáneas como la capacidad antioxidante, la cual mejoran la calidad de los productos alimentarios finales como lo menciona Serra Valentina et al. (2021). Los polifenoles representan la ventaja de ser más aceptables para los consumidores que los aditivos sintéticos, ya que se consideran “no tóxicos”, facilitando la preservación de los productos de origen animal reduciendo  el número de aditivos como lo son la vitamina E y antioxidantes sintéticos.

A través del uso de la fitoterapia, que puede utilizarse sin necesidad de receta ni tiempos de espera, se busca reducir la carga parasitaria de los nematodos a niveles saludables en animales de producción tanto lechera como de carne, evitándose de esta manera el uso indiscriminado de sustancias de síntesis química, que ejercen un efecto residual  en las praderas, afectando la resiliencia de estos ecosistemas, en cuanto a la reincorporación del material orgánico.


*Extraído y adaptado del Trabajo Fin de Máster “Evaluación y efecto de la aplicación de bolos multiherbales fitoterápicos en la carga parasitaria en ganadería bovina lechera”,

realizado por José Manuel Grisales Beltrán, Médico Veterinario Zootecnista. Dirección Académica: Álvaro M. Fernández-Blanco Barreto.

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